Trincheras y nidos

En la zona de Gaztelumendi, al contrario que en Cabo Billano, no encontraremos cañones, ni restos de ellos. en vez de eso, se observan vestigios de lo que podría ser una zona de combate cuerpo a cuerpo, o casi, con el único refugio de algunos huecos cavados en la tierra y sin mas armemento que ametralladoras, en el mejor de los casos.
Lo poco que se ve de hormigón se encuentra a escasos dos kilometros de Larrabetzu y en la cima del Gaztelumendi. Se trata de tres nidos de ametralladoras desde los que los gudaris podían disparar con cierta seguridad.

El nido de Larrabetzu, el de mayores dimensiones, presenta un aspecto fragil por sus paredes de piedra. En el se podían atrincherar unos 14 tiradores en posición de disparo.

Como decía, la seguridad que ofrecían estos nidos era relativa, ya que los ataques aéreos resultaban fatales para estas construcciones y sus ocupantes. Esto se puede ver facilmente en el nido de Larrabetzu y en uno de los de Gaztelumendi, que muestran orificios provocados por la artillería aérea. Son facilmente imaginables las consecuencias para quien se encontrase en su interior.










En el caso de los nidos de ametralladoras de la cima del Gazletumendi, su construcción tiene una apariencia mas robusta, pero son de menores dimensiones. En un espacio de aproximadamente dos metros de ancho debían ponerse unos 5 tiradores.

Los dos nidos se encuentran en la ladera noreste del monte, dibujando la linea que seguiría el Cinturon de Hierro. Siguiendo esta linea, se pueden encontrar en todo el cordal kilómetros y kilómetros de trincheras, algunas de ellas facilmente visibles, y otras semicubiertas por las zarzas y la maleza. Estas trincheras, en su dia "protegidas" de alambradas de espino, servían de posiciónes de tiro y "refugios" para los gudaris. Sus dimensiones permitían a una persona de estatura media mantener las piernas a cubierto y el resto del cuerpo apoyado hacia delante, en posición de tiro, y refugiarse agazapada eliminando totalmente el ángulo de tiro a alguien que estuviese al nivel de la trinchera o por debajo de este. Sin embargo, en caso de ataque aéreo o por encima del nivel de la trinchera, el gudari se encontraría totalmente indefenso.